Los médicos nos han informado que a pesar de haberse estabilizado las funciones cardiovasculares, la situación sigue siendo de mucho riesgo: "somos pesimistas de su recuperación" nos han dicho esta mañana. A simple vista, se evidencia su dificultad para respirar naturalmente; siempre dependiente del oxígeno, a veces, se le hace imposible mantener una conversación sin esforzarse. Con todo, hasta ahora no manifiesta dolor y se muestra de buen ánimo, agradeciendo continuamente el atravesar estos momentos con tanta paz.