Estoy estos días entre los hermanos que viven en San Sebastián del Coca (Cañón de los monos), en la amazonía ecuatoriana, Juan Cantero, Pablo Gallego y José Setién. Con ellos he compartido noticias, proyectos, alegrías, dificultades, en definitiva una vida que se va haciendo camino, misión en esta diócesis del Coca. Quiero enviar una cordial felicitación a todos los hermanos en este día de nuestra Madre la Virgen del Carmen. Espero que este día sirva para que crezca en nosotros y en todos los que formamos la gran familia del Carmelo Descalzo ese amor a nuestra Madre, de la cual experimentamos la dulzura de su protección maternal. Tendremos nosotros aquí la celebración de la Eucaristía los cuatro. Por la tarde regreso a Quito. Pero en la tarde habrá en El Coca una procesión portando la imagen de la Virgen del Carmen, que es la patrona de la Catedral, por los tres ríos que bordean la ciudad. Y después una celebración que presidirá el Sr. Obispo de esta diócesis, Mons. Jesús E. Sádaba. Le pido a Ella que en este día todos sepamos escuchar a Jesús, ya que nos lo pide: "Hagan lo que El les diga" y cada día sigamos creciendo en nuestro deseo de amar y servir a nuestros hermanos. No me olvido de las Carmelitas Descalzas, del Carmelo Seglar, de los Cofrades y de tantos que pertenecen a la gran Familia del Carmelo Descalzo. Particularmente pongo en manos de la Virgen a nuestros hermanos enfermos, ancianos y los que están sufriendo, que sientan esa presencia de Ella que les fortalece. Un cordial saludo y un gran abrazo para todos y cada uno de los hermanos de esta Provincia.